- Descanso visual (Regla 20-20-20): Cada 20 minutos, aparta la vista de la pantalla y mira algo a 20 pies (unos 6 metros) durante 20 segundos. Esto ayuda a reducir la fatiga ocular y mejora la circulación sanguínea en los ojos.
- Ajusta la iluminación: Evita el deslumbramiento de las pantallas y utiliza una luz suave en la habitación. La luz natural es la mejor, pero si usas luz artificial, opta por una luz cálida y evita luces demasiado fuertes o directas.
- Mantén una distancia adecuada con las pantallas: Asegúrate de que la distancia entre tus ojos y la pantalla sea de unos 50 a 70 cm, y que el centro de la pantalla esté a nivel de los ojos o ligeramente por debajo de este.
- Parpadea frecuentemente: Cuando miras una pantalla por mucho tiempo, parpadeamos menos, lo que puede causar resequedad en los ojos. Intenta recordar parpadear con mayor frecuencia para mantener tus ojos hidratados.
- Usa gafas adecuadas: Si necesitas corrección visual, asegúrate de usar gafas con la graduación correcta. Además, considera las lentes con filtro para luz azul si pasas mucho tiempo frente a pantallas.
- Hidrata tus ojos: Si sientes que tus ojos están secos o irritados, puedes usar gotas hidratantes o lubricantes sin conservantes para evitar la resequedad ocular.
- Realiza ejercicios oculares: Los ejercicios para los ojos pueden ayudar a aliviar la tensión. Un ejercicio simple es mirar un objeto cercano durante 10-15 segundos y luego mirar algo lejano durante el mismo tiempo. Esto ayudará a relajar los músculos oculares.
Cuidar de tus ojos con pequeños hábitos diarios puede hacer una gran diferencia. Si la fatiga persiste o empeora, es recomendable consultar con un profesional de la salud visual.
Kenneth Madriz
American Optometric Association (AOA) / American Academy of Ophthalmology